Las mujeres embarazadas pueden conducir un automóvil sin dificultades antes de su sexto mes de embarazo, pero deberán seguir algunas recomendaciones para mantener la integridad física de ellas y de sus bebés.
De acuerdo con el Centro de Experimentación y Seguridad Vial, (Cesvi México), antes que nada la mujer en estado de gestación debe tomar en cuenta seriamente todos los cambios que experimentarán en lo físico durante su embarazo si desea continuar conduciendo.
Algunos de estos cambios son: el aumento en la zona de su abdomen, posibles alteraciones en su visión, variaciones hormonales y la hinchazón que pueden experimentar en algunas zonas de su cuerpo, así como posibles náuseas y cansancio que pueden influir en su capacidad de concentración. Por lo anterior, en caso de sentir algún malestar lo ideal es no conducir ningún tipo de automotor, señala Cesvi México.
Con base en lo anterior, es necesario que las mujeres embarazadas sigan estas medidas de seguridad al conducir:
1.- No obstante que se realicen recorridos cortos, es indispensable el uso del cinturón de seguridad, el cual deberá estar en su banda inferior a la altura de las ingles, es decir por debajo del abdomen y nunca sobre el vientre, al tiempo que la banda superior deberá ir entre los senos.
Varios estudios han demostrado que tanto la madre como el pequeño tienen más posibilidades de sobrevivir en caso de accidente si llevan puesto el cinturón de seguridad.
2.- Aumentar la distancia entre el asiento y el tablero para evitar que el abdomen roce con el volante, esto sin perder el buen contacto con los pedales (lo ideal es por lo menos distanciar 25 cm el abdomen del volante).
3.- El respaldo del asiento tiene que estar lo más recto posible y el centro de la cabecera debe estar a la altura de la nuca.
4.- Mantener activada la bolsa de aire tanto del piloto como el copiloto. El airbag no constituye ningún peligro para la mamá.
5- En trayectos largos, se sugiere hacer paradas cada dos horas para descansar, alimentarse, estirar las piernas o comer algo durante algunos minutos, aunque la mujer embarazada no sea quien conduce.
6.- También es importante que la ropa vaya siempre por debajo del cinturón, a fin de evitar presiones incómodas.
7- En el caso de que ocurra algún accidente, es importante mantener la calma, pedir ayuda y acudir al servicio médico de urgencia para revisar el estado de salud tanto de la madre como del bebé, no importa si el impacto se considera mínimo.
8.- A medida que transcurre el embarazo se va limitando la libertad de movimiento de la futura mamá, lo que puede dar lugar a que en situaciones críticas se reaccione con menos rapidez y agilidad. Por eso es mejor que, en la medida de lo posible, a partir del sexto mes sea otra persona la que conduzca.